Enséñale a tu hija a esforzarse, no importa si se equivoca

Muchos papás aún educan a hijos e hijas basados en ideas sexistas que la sociedad no ha terminado de sacudirse. Los hombres aprenden a no tener miedo y convertirse en los héroes de la historia, con lo que asumen sin temor los nuevos obstáculos en la vida. Las mujeres, desde niñas, aprendemos a sonreír aun cuando no tenemos ganas, a permanecer calladas y a portarnos bien (lo que sea que eso signifique).

Así, papás, maestros y otros adultos limitan las capacidades de las mujeres desde temprana edad.

En los años 70, investigadores de la Universidad de Columbia hicieron pruebas con niños y niñas para ver cómo reaccionaban ante nuevos retos. Los resultados arrojaron pistas sobre las diferencias en la forma en que niños y niñas son educados.

Las niñas, sobre todo las más talentosas y con coeficiente intelectual más alto, mostraban una conducta de indefensión aprendida y eran más propensas a rendirse ante las nuevas tareas. Los niños, en cambio, lo tomaron como algo emocionante; un reto intelectual a vencer.

¿Por qué las niñas se muestran más inseguras que los niños de la misma edad?

Según los estudios, las niñas de quinto año suelen tener mejores calificaciones que los niños en todas las materias. Sin embargo, su actitud ante los obstáculos tiene que ver con las creencias sembradas en niños y niñas desde temprana edad por motivos de género.

A los niños se les enseña a ser valientes, a no rendirse. A las niñas se les enseña a ser perfectas y a no equivocarse.

Pelea como niña.

No obstante, a las niñas también les gusta jugar en el lodo, trepar árboles y ensuciarse. También les interesan la ciencia, las matemáticas y las historias de superhéroes (de las que cada vez hay más mujeres como protagonistas, con las que las mujeres jóvenes pueden identificarse).

Al final, si tienes una hija, recuerda que no es su obligación ser perfecta ni agradable. Deja que sea feliz: enséñale que equivocarse está bien y que los retos son emocionantes, independientemente del resultado. Experimenten juntas, recuérdale lo valiente que es y lo importante que es expresar lo que piensa. ¡Las niñas tienen mucho que decir!